LA VERDAD DUELE.

LA VERDAD DUELE.
Por El Perro Amarillo

“Para ser buen periodista, hay que ser buena persona”, sentenció hace décadas un periodista polaco. Sin embargo, el calificativo moral se queda corto. Para ser buen periodista hay que ser “humano”, y en el complejo ejercicio de un periodismo humano, en un país donde la información se vende, y se usa para extorsionar, la verdad se ha puesto de moda.

El proyecto de El Perro Amarillo surgió debido a la censura en los medios de comunicación tradicionales, que no quisieron sumarse a la tarea de abrirle los ojos al pueblo con la verdad. Surgió para gritar esa verdad desde un micrófono. Desde un periódico. Surgió para contarnos sobre la lucha en las calles, sobre la rabia, sobre la impotencia ante tanta corrupción.

El programa de televisión El Perro Amarillo TV salió al aire por primera vez en el canal UneTV, en 2017 y, luego de una descarada censura, decidimos quedarnos, modestamente, en las redes sociales. La primera transmisión se hizo desde casa y con un celular. El Perro Amarillo nació el 17 de agosto de 2018 en Facebook.

Hoy, hace 4 años, el equipo de El Perro Amarillo emprendió, junto a ustedes, el camino de la independencia absoluta para entregar al pueblo la verdad. Nos lanzamos al vacío. Sin anunciantes estatales o privados, sin cooperantes. Gracias a cada uno de ustedes, logramos establecer una red de apoyo que nos solo permitió mantener el proyecto, también nos hizo crecer. Ahora contamos con un estudio y tenemos un periódico digital donde se escribe, con pruebas, la nueva historia de Honduras.

El lenguaje y la manera desafiante de Milton Benítez, llama a los actos y a sus actores por nombre y apellido. Se burla del poder. Condena la corrupción. Eso atrajo la verdad y con ella se acercaron las fuentes: jueces, funcionarios, empresarios, obreros, testigos protegidos, víctimas y victimarios. Seres humanos necesitados de un micrófono limpio para espetar la verdad con la certeza que sería develada al pueblo sin cortes, sin censura.

La verdad de cada día nos alimentó, pero también puso a este equipo en riesgo: querellas, boicot, soborno, negación de visas, robos, campañas de difamación. Los corruptos y corruptores, señalados con la verdad, han tratado de todas las formas posibles de destruir el vínculo poderoso entre El Perro Amarillo y el pueblo empobrecido, humillado, maltratado.

¡La verdad no se puede callar! De nuestros corazones mana la legítima indignación del ser humano que piensa y actúa por su propia voluntad. ¡A eso le tienen miedo!