FICOHSA DESAPARECE AL SANAA

FICOHSA DESAPARECE AL SANAA
Por El Perro Amarillo

“El SANAA dejará de ser prestador de servicios y se convertirá en un ente técnico para los nuevos proveedores de agua” anunció Héctor Sevilla, gerente general del Sistema Nacional de Acueductos y Alcantarillados - SANAA, dando casi por concluido el proceso de privatización del servicio público de distribución de agua en Honduras, iniciado en 2014. De esta manera el próximo año desaparece el SANAA como institución prestadora del servicio, y la tarea pasa a las municipalidades, a través de la Unidad Municipal de Agua Potable y Saneamiento – UMAPS.

Actualmente Banco FICOHSA, de Camilo Atala, tiene a su cargo el manejo financiero y contable, y la recaudación de pérdidas de la UMAPS a través del fideicomiso para la contratación de los servicios de administración fiduciaria para el manejo financiero contable de la tesorería de la UMAPS. Desde octubre de 2020 y por 30 años, FICOHSA manejará entre 650 y 700 millones de lempiras del SANAA por año.

El equipo de investigación de El Perro Amarillo no logró comunicarse con el Sr. Sevilla, sin embargo, fuente de entero crédito al interior del SANAA informó que a las alcaldías solo las utilizan para apantallar la privatización, quién maneja todo es Ficohsa junto a la empresa privada proveedora del servicio que decidan contratar. Una parte del servicio del agua ya está privatizada, la maneja una empresa ecuatoriana, se llama Hidalgo e Hidalgo – H&H

H&H es un consorcio dedicado a la construcción de carreteras y saneamiento con sede en diferentes países de Latinoamérica, algunas de estas empresas tienen antecedentes de corrupción. En Panamá, según el diario La Estrella, H&H desvió fondos a distintas cuentas bancarias de funcionarios públicos; en Colombia, según el diario Kaosenlared, H&H cuenta con varias denuncias de pobladores por incumplimiento de compromisos sociales y laborales.

Si no fuera suficiente la privatización del SANAA en manos de FICOHSA y de un consorcio denunciado por corrupción, a esto se suma el hecho lamentable del despido de más de 1,200 empleados del SANAA que quedarán en la calle gracias a la tercerización de este servicio consignado como un Derecho Humano.