RECO “sangra” a hondureños de Islas de la Bahía

El equipo de El Perro Amarillo llegó a la isla de Roatán el pasado 24 de septiembre con el propósito de denunciar el proyecto de Zonas Especiales de desarrollo - ZEDE  y atender de primera mano las denuncias de los isleños. En el lugar decenas de personas también coincidieron en hacer notoria otra problemática: Roatán Electric Company - RECO, se aprovecha de ser la única compañía energética en la isla, haciendo cobros exorbitantes por este servicio. Los habitantes de la isla denunciaron que “¡los cobros de energía son excesivos!” dado que la factura energética por un ventilador, dos focos ahorradores, una televisión y el cargador para el celular no baja de 1500 lempiras. Una familia que añade una refrigeradora y un par de focos a la lista llega a pagar hasta 6 mil lempiras; es decir, poco más de la mitad de un salario mínimo que reciben los hondureños.

El Congreso Nacional fue quien otorgó a RECO el monopolio de la energía en Roatán, al cederle en 1992 los derechos exclusivos para la explotación de la generación y distribución de energía en la isla, mediante decreto número 183-92. En 2014, luego del constante reclamo de la población isleña, RECO se comprometió mediante decreto número 345-2013 a reducir en un 20% el costo de energía, acuerdo que ha incumplido puesto que las tarifas energéticas continúan en aumento.

Antes de ser vendida al estadounidese Kelsy Warren, la empresa energética fue dirigida por Geovany Silvestri (actual Gobernador de Islas de La Bahía), Evans McNab (primo del diputado Ronnie MC Nab) y Lui Mclaughli. La creación de RECO es una prueba de la intención del gobierno en privatizar los servicios eléctricos, bajo la excusa de impulsar el turismo o la mejora de estos servicios básicos, lo que demuestra que la privatización solo beneficia a los empresarios generadores de energía.

Recido de luz eléctrica entregado a una familia de Craw Fish Rock, Roatán, por parte de la empresa RECO, septiembre de 2020.
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