Bográn: “Buscan un culpable y me han elegido”
Marco Bográn, exdirector de Inversión Estratégica de Honduras - Invest-H, fue humillado con gritos, pancartas y dos “huevazos” en la cabeza tras su salida de la Agencia Técnica de Investigación Criminal - ATIC, donde compareció ayer por segunda ocasión con el fin de rendir cuentas por la compra de mascarillas sobrevaloradas a Grupo GyT, propiedad de la diputada Waleska Zelaya y su esposo Juan José Lagos. “Son décadas en las cuales no ha habido asistencia médica, y la gente está enojada, y yo lo comprendo, entonces tienen que buscar a un culpable y me han elegido a mí”, dijo Bográn a los medios de comunicación y añadió “soy inocente, soy inocente y lo voy a demostrar, mi conciencia está tranquila”.
Los hechos contrastan con las declaraciones de Bográn, quien durante las compras de emergencia por Covid-19, además de favorecer a Grupo GyT con la adquisición de mascarillas sobrevaloradas, también pagó a Axel López más de 812 millones de lempiras por su “intermediación” en la compra de hospitales móviles y otorgó según nuestras investigaciones, a la empresa Consultores en Ingeniería S.A. de C.V. - CINSA propiedad de su tío Napoleón Bográn Idiáquez, un contrato por 1.2 millones de lempiras para supervisar la construcción de un plantel en Santa Rosa de Copán, para la instalación de un hospital móvil (que luego de seis meses aún no llega al país).
Bográn, quien renunció a su cargo el pasado 27 de junio, dejó de lado la actitud prepotente con la que hacía presencia en foros televisivos para ahora interpretar el papel de víctima; sin embargo, aseguró no tener miedo de ir a la cárcel por los delitos de fraude, abuso de autoridad y malversación de caudales públicos, por los que está siendo investigado. No es cuestión de elegir un culpable, es necesario que paguen todos los implicados en el deterioro sistemático de los servicios de salud, que a juicio del Colegio Médico de Honduras, representa un genocidio de los hondureños más empobrecidos.
